EL PRINCIPIO DEL FIN

           La muerte de un Carabinero de Chile en manos criminales, me llena de rabia y tristeza porque demuestra, cada vez que sucede, lo frágil que es nuestra sociedad al ponerse en peligro la estabilidad de un país maravilloso y democrático, en donde el respeto al Estado de Derecho y sus Instituciones, ha sido el principio rector para todos sus habitantes durante muchos años. Un país que no es perfecto, pero que ha llegado a ubicarse en muchos rubros, por encima de la mayoría de los países del resto de América Latina y de muchos otros del mundo.

     Lamentablemente, hemos caído muy bajo, porque ni este Gobierno, ni la coalición de Apruebo Dignidad* que lo respalda, tienen la formación, ni la experiencia, para conducir el país en este difícil momento de la historia de Chile y del mundo. Aunque está claro que nunca tuvieron las competencias para hacerlo, como así lo reconocieron y así lo han demostrado en el poco tiempo que llevan "desgobernando" el país. Tampoco han demostrado tener respeto, ni sensibilidad por las tradiciones, el patrimonio histórico y los bienes de los chilenos. Menos, tienen autoridad moral para defender nuestros Carabineros, que siempre han sido golpeados, humillados y mal tratados por todos ellos.

     El tiempo, con una mayoría ciudadana que los puso en el Palacio de la Moneda, se terminó. Fue una mayoría circunstancial, por eso ha sido el más corto de la historia de un gobierno. “Ha durado menos que un candy en la puerta de una escuela”. La confianza ciudadana desapareció desde el primer día de gobierno. Se esfumó en medio de sus constantes desaciertos, arrogancia, abusos del poder y volteretas...

        Gabriel Boric fue honesto en un comienzo, cuando reconoció su falta de preparación para ser candidato a la Presidencia de Chile. Pero, su honestidad duró poco. Pudo más la tentación, el orgullo y la ambición, que el amor a la patria y el respeto a todos los chilenos y por eso, finalmente, aceptó ser el candidato de una coalición formada por partidos políticos y simpatizantes de extrema izquierda, que aprovechando el mal gobierno de Sebastián Piñera, la pandemia del COVID-19 y el pánico ciudadano provocado por un "estallido social" que tomó al país por sorpresa y que en ese momento nadie sabía quién lo había promovido y apoyado, se "subieron por el chorro" ante una desconcertada y golpeada ciudadanía, para ganarlo todo, despreciando los logros del pasado y olvidando que "otra cosa es con guitarra" y que nada es para siempre, especialmente cuando se gana de mala fe.

      Desde luego que los problemas que atraviesa Chile no son responsabilidad de este gobierno, pero tampoco pueden ser atribuidos a uno solo de los gobiernos anteriores. Ha sido un proceso de desgaste en donde toda la clase política tiene responsabilidad, unos más que otros por supuesto, incluyendo la ciudadanía, porque hemos estado acostumbrados a votar por el "menos malo", hasta que llegó el día de equivocarnos y permitimos que ganara el peor de todos, porque lo único que sí está claro, es que quienes hoy gobiernan han sido y son los aduladores de los regímenes criminales que han llegado a Latinoamérica y los principales opositores a las medidas de mayor seguridad y protección a la ciudadanía, que exigen otorgar mayores facultades y apoyo a las fuerzas de orden y seguridad nacional, para hacerle frente a la creciente violencia y criminalidad que está azotando el país. Por lo demás, el orden y la seguridad son la principal razón de ser de la existencia de un Estado y que una sociedad exige para vivir en paz y alcanzar la felicidad...

       En mi pueblo hay un dicho: "Quien no hace goles, tiene que ver hacerlos" y el gobierno de Gabriel Boric y su coalición, están perdiendo por goleada de la delincuencia, los violentos y los criminales de todo tipo. El gobierno ha estado "cosechando lo que sembró" durante todo el tiempo que fueron oposición, porque quienes tienen la violencia, la delincuencia y el crimen como una forma de vida, jamás van a renunciar a su estilo de vida por una excarcelación, ni por una pensión de gracia.

      No se olvide que los regímenes que han llegado al poder en Latinoamérica, teniendo la violencia como estrategia permanecen en el tiempo, porque hacen la "vista gorda" al crimen organizado. Son gobiernos secuestrados por bandas criminales, muchas veces camufladas en causas sociales. La estrategia histórico-ideológica de la extrema izquierda de incentivar y validar la violencia para llegar al poder, también dio resultado en Chile; algo inesperado, de esto no hay duda. Y como si eso fuera poco, desde antes de la posesión del gobierno, tenían prácticamente asegurada una Nueva Constitución a su medida. Parecía que los "astros se habían alineado" a su favor y gobernar Chile sería "pan comido". Creían haberle dado el "palo al gato". Sin imaginar lo que llegaríamos a pensar los chilenos tan solo un mes después de su posesión: ¡Qué lejos se ve la luz al otro de este túnel, en que nos ha metido la ultra-izquierda chilena!...

       Hoy solo le queda al gobierno la alternativa de una salida digna y creo que la mejor sería, seguir profundizando y acelerar la cesión del gobierno en silencio, a los miembros de la ex-Concertación, que al menos han demostrado tener experiencia, formación y humildad. -Rubén Solano

* Apruebo Dignidad es la Coalición Oficial del Gobierno de Gabriel Boric y está conformada a su vez por dos coaliciones: 1) Frente Amplio (Convergencia Social, Revolución Democrática y Comunes), y 2) Chile Digno (Partido Comunista y Federación Regionalista Verde Social).