jueves, 22 de noviembre de 2012

MI VOTO POR...

Mi voto será por un candidato:

•Que promueva la Revocatoria del Mandato, por parte de los ciudadanos, a los elegidos por voto popular cuando no cumplan sus promesas de campaña.

•Que diga que la educación tiene que ser un derecho alcanzable para todos. Jamás gratis "per se". Pero si debe ser un regalo para los más vulnerables y un premio para los más comprometidos. Que promueva una educación para el siglo XXI, acorde con las exigencias de la era de las comunicaciones y la tecnología.


•Que comprenda que la educación para la era industrial ya no es suficiente y que las nuevas generaciones necesitan una educación que les estimule la inteligencia emocional.


•Que entienda la diferencia entre la necesaria asistencia social para las personas vulnerables y el apoyo oportuno a las personas que aman el emprendimiento.


•Que incorpore el plebiscito como herramienta para resolver las discusiones valóricas, como el aborto, la pena de muerte, el matrimonio gay, la eutanasia,..


•Que se comprometa a invitar a formar parte de su gabinete a algunas personas de oposición por sus reconocidos meritos y aportes a la sociedad.


•Que no le tiemble la mano a la hora de aplicar o de hacer cumplir las leyes.


.Que instaure las Veedurías Cívicas, como instancias para la participación y fiscalización de la ciudadanía en el cumplimiento de leyes y ejecución de obras civiles de impacto social.

•Que defienda con claridad a la población de los eventuales abusos del poder de sus funcionarios públicos y militares; pero que con firmeza, también haga respetar a sus funcionarios y militares de los eventuales atropellos de algunos ciudadanos.

•Que no olvide las atrocidades de gobiernos o dictaduras del pasado, pero que tampoco profundice en las diferencias y por el contrario sea un adalid de la reconciliación.


• Que sea un promotor de la integración y la inclusión ciudadana, sin gobernar para los ricos, ni para los pobres, ni para la clase media, ni para unos, ni para otros, sino para todos!

•Que proponga al menos medio Año Sabático Pagado, para todos los egresados de educación media, de tal manera que puedan viajar y conocer el mundo exterior antes de ingresar a la universidad.


•Que al llegar al poder no se olvide de sus promesas de campaña ni se transforme en un Chávez o en una “K”, ni modifique la constitución ni manipule la población para perpetuarse en el poder.


•Que no tome decisiones bajo presión, pero que tampoco espere una marcha o una protesta para actuar.


•Que tenga un buzón de “Quejas y Reclamos” en donde los ciudadanos puedan hacer sus demandas, se acuse recibo de ellas con indicación de fecha máxima de respuesta y en efecto reciban respuesta oportuna. Siempre la respuesta favorable o desfavorable, debe tener una explicación clara.

•Que instaure el “silencio administrativo positivo” que quiere decir, que cuando una institución del gobierno no da respuesta oportuna o en un plazo predeterminado a una demanda ciudadana se entiende que la petición es aprobada.

•Que dé a conocer sus proyectos de ley de notorio interés ciudadano a la opinión pública, abriendo un espacio a la discusión de los mismos, y procurando que en ellas participen las comunidades afectadas o más interesadas, con invitación de los equipos técnicos de las Universidades, antes de presentarlos al Congreso.

La historia de la humanidad ya demostró hasta la saciedad, que todos los seres humanos somos iguales, en importancia, oportunidades y merecimientos. Que no existen causas ni movimientos pequeños. Que para desestabilizar un gobierno, una economía o para acabar con el planeta ya no se necesita una bomba atómica. Que algo tan simple, como un llamado a través de las redes sociales, pude lograr un milagro. Que el tiempo de las dictaduras, las monarquías, las autocracias y del mandato divino, ya terminó. Que ni el capitalismo ni comunismo son posibles. Que no existen las derechas ni las izquierdas políticas. Que ni la explotación, ni la limosna, ni la manipulación le han traído paz ni la libertad a la humanidad. Que todos cabemos en la tierra y en el universo y… Qué todos somos responsables de todos!


Necesitamos menos gritos de “Ce Hache i” porque el compromiso con el país no debe reducirse al de un porrista, ni al de un fanático de galería. Necesitamos más acción y muchos más: “En Chile, se hace así!”

miércoles, 17 de octubre de 2012

Sobran Técnicos, pero falta Actitud!


El partido de ayer en la noche entre Chile y Argentina, dejo claro que el mayor problema de la Roja está en la actitud de sus jugadores. Personalmente, no me extraña porque es la misma actitud que tienen muchos jugadores en el Torneo de Fútbol Nacional, que durante el año no juegan a nada, pero cuando tienen que enfrentarse con Colo-Colo o con la U, se crecen y muestran todo su talento y capacidad de juego en equipo.

La Roja puede darnos muchas alegrías, cuando se lo propone. Pero con su actitud, los jugadores nos dan muchas decepciones. Hoy tenemos en las clasificatorias al Mundial, el primer lugar en tarjetas recibidas, el mayor número de expulsados, somos noticia internacional por los escándalos de algunos jugadores fuera de la cancha, y suma y sigue...

Creo que falta mucha regularidad y para alcanzarla es necesario mucha disciplina y rigurosidad del cuerpo técnico con los jugadores. No tengo duda que San Bielsa puede ser mejor garante de este sello para la Roja, porque tiene un "látigo" más duro y un pulso más firme. Pero, lamentablemente no es conveniente hablar más de él, porque fue más allá de su rol. Se metió en política y cuando se fue, dejo al país más dividido que Pinochet. Creo que La única forma de volver sería casado con la "Gordis" que tiene un apoyo del 85%...

Por otra parte, no nos digamos mentiras, pero los únicos enemigos de Borghi son los "Chunchos" los cuales quieren "meter" a como dé lugar al J. Herrera en la Selección, que por lo demás, no es mucho mejor que Bravo o Pinto, solo sería un dolor de cabeza mayor para cualquier técnico y por eso creo que nadie lo "compra"...

El Borghi es un buen técnico y goza de méritos y reconocimiento internacional, tiene lo suyo y debe continuar al frente de la Selección, mucho más ahora que está claro para todos en donde está el principal problema de nuestra Selección. Basta ya de echarle la culpa al empedrado!

sábado, 8 de septiembre de 2012

¿Es posible que haya paz en Colombia?

En el fondo de mi corazón me siento feliz porque en Colombia nace una nueva esperanza de paz. Pero, como ciudadano que nació y ha vivido en medio del conflicto, tengo derecho a dudar de sus resultados y de las buenas intenciones de las partes. Son más de 60 años de enfrentamientos, en donde los protagonistas se han dado con todo, porque nunca han tenido reglas. Se ha utilizado toda clase de armamento. Se ha tenido, se ha pedido y se ha recibido todo tipo de ayudas para lograr el sometimiento de una parte a la otra. Los enfrentamientos se han dado en cualquier lugar del país y aún del exterior. Nunca se han respetado las treguas y en medio de los combates ha caído mucha gente. No sé cuántos miles y no sé, si quiero saberlo, porque ha muerto mucha gente inocente, niños, ancianos, enfermos y discapacitados.

Creo que en Colombia nadie ha escapado a las consecuencias de los enfrentamientos. Todos los colombianos y los extranjeros residentes allí, han perdido al menos a alguien muy cercano y pueden contar más de una anécdota de lo que ha significado para ellos vivir en medio de este conflicto, que como lo he dicho,  lleva más de 60 años sin que haya demostrado para nadie por una sola vez al menos, que sea un buen camino para solucionar las diferencias que dicen tener.  
En Colombia se vive con fe y esperanza y se sobrevive de milagro. No deseo contar cómo se inició esta “pelea”, porque sería una falta de respeto para quienes se han dedicado a estudiar el fenómeno, acumulando información y llevando las estadísticas de los muertos, los enfrentamientos, los atentados, los secuestros, los desplazados, los autoexiliados, los daños a la propiedad pública y privada, y una cantidad de etcéteras. Además, siempre he creído que, por la cantidad de años que llevan los enfrentamientos, para cada persona la historia del conflicto es diferente y parte de manera distinta. La mirada que se puede tener de él, por lo tanto es variable porque depende de las vivencias personales de cada uno. Lo cierto es que hoy todos somos igualmente víctimas y parte del conflicto. Estamos adentro de manera voluntaria o involuntaria. Las personas sensatas, que somos la inmensa mayoría de colombianos, no tenemos simpatía por uno u otro bando. Solo hay más o menos odio por uno de ellos. Generalmente, el mayor odio se recarga hacia el bando que más nos ha hecho llorar o sufrir y desde esta perspectiva, aunque nadie justifica los ataques violentos, sí queremos comprender las acciones de represalia que se toman desde nuestra vereda.
A lo anteriormente expuesto hay que agregar, que ideológicamente la lucha armada en Colombia también ha tenido muchas mutaciones que se han mezclado y entrelazado, haciendo aún más difícil su comprensión. Sí está claro, que son demasiados intereses, tanto internos como externos, que han metido y continúan metiendo mano al conflicto,  atraídos por la cantidad de dinero que se mueve con él y con el cual no solamente se ha podido comprar armamento, sino conciencias. El dinero de esta guerra ha contaminado y corrompido todas las esferas políticas y sociales del país. Por lo mismo, es muy difícil creer en las buenas intenciones de quienes se atreven a levantar su voz promoviendo un cambio social que traerá la paz y una mejor calidad de vida para los colombianos.
Mi conclusión es que son las acciones unilaterales y no las palabras, ni los acuerdos, las que devolverán la paz a Colombia. Ni siquiera los países garantes ni acompañantes mencionados, tienen la autoridad moral ni la capacidad para generar la confianza que necesita un proceso de paz definitiva…
Cuando un día, de manera desprevenida, mire hacia atrás y pueda constatar con sorpresa y admiración que no se escuchan más ruidos de bombas ni disparos. Cuando sepa que no hay ninguna persona secuestrada en Colombia. Cuando en los noticieros ya no se vean las madres llorando porque sus niños de 15 y 12 años han sido raptados y obligados a formar parte del “ejército del pueblo”. Cuando abra mi Facebook y vea las fotos de mis hijos y mis nietos acampando con sus familias y sus amigos en cualesquiera de los hermosos rincones de mi país,… Entonces sí, en silencio para no llamar la atención, comenzaré a contar y a marcar en el calendario los días que Colombia vive sin conflicto, hasta perder la cuenta y olvidarme un día de seguir marcando, porque en mi país se volvió una costumbre vivir y dormir en paz!...Viva Colombia. Viva mi gente!
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Llegué a Chile un frío día de invierno en busca de un mejor futuro y un espacio más tranquilo para mí y para mi familia… Han pasado muchos años y un día también me olvidé de seguir contando los que transcurrían lejos de mi tierra, de mi familia, de mis amigos y de mis costumbres...Es que el amor a la patria es infinito y tierno como el amor que siento por mi madre... Confieso que todavía me cuesta dormir y sufro pesadillas. La angustia permanente y el temor de un ataque no se van de mi mente, pero reconozco que en Chile he conocido y experimento a diario la paz que deseo y sueño para mi Colombia!

lunes, 27 de agosto de 2012

Chile ¿Necesita Cambiar la Constitución Nacional?

Hacemos o pedimos un cambio cuando no estamos a gusto en donde estamos o con lo que tenemos. Cuando esto ocurre nos rebelamos y hasta donde nos es posible, realizamos o exigimos el cambio. Querer cambiar es legítimo y mucho más cuando percibimos como indignante el comportamiento de algún actor de la sociedad.

La Constitución Nacional de un país es su carta de navegación. define su rumbo. La sociedad puede sentirse cómoda o incómoda con el rumbo seguido y por eso tiene la libertad, a través del tiempo, de confirmarlo o modificarlo. La historia constitucional de nuestro país ha sido objeto de muchos cambios. Sin embargo, siempre que se sugiere un cambio en la Constitución, es importante preguntarnos como sociedad, cuáles son las motivaciones, porque ellas nos indicarán la necesidad y magnitud del cambio del rumbo que se quiere dar a la sociedad.

Desde hace un tiempo a esta parte, he comenzado a reflexionar sobre las situaciones que a las personas nos produce rabia en nuestro país, y he comenzado a preguntarme por qué ocurren estas situaciones y quién o quiénes son los verdaderos responsables de provocarnos tanta indignación. Me ha parecido que si encuentro una respuesta a estos interrogantes, quizás sea más facil aceptar o no, un cambio en la Constitución Nacional.

Para lograr mi propósito he dado una mirada retrospectiva a las últimas situaciones que he vivido y que me han provocado algún tipo de indignación. De esta manera, he identificado cinco actores que se repiten en ellas y que considero son los responsables de los “fatales” desencadenamientos.

Les parecerá curioso, pero después de descubrir este método, se ha vuelto una obsesión para mi “estudiar” cada nuevo caso o situación que experimento de manera personal o que escucho, leo o veo para luego ubicarlo en alguna de las cinco categorías que he identificado. Haré una relación de ellas y colocaré un ejemplo de cada una para ilustrarlos y al final, haré unos comentarios generales:

1.- Yo mismo: Tengo que partir reconociendo que algunas de las situaciones que me han molestado no hubieran ocurrido si hubiera estado o hubiese sido más atento o cuidadoso. Un ejemplo es la indiganción que me produjo la multa que me impuso la municipalidad de Ñuñoa por retrasarme en el pago de la patente comercial. Estuve alegando con el funcionario de la Municipalidad. La cuenta había llegado al domicilio después de la fecha de vencimiento y creía que no merecía una multa... Hoy reconozco que no fue una buena excusa, porque cada seis meses, durante cuatro años, tengo que pagar esta patente. Se que los plazos se cumplen en el mes de enero y en el mes julio de cada año. Si la factura no había llegado al comienzo del mes de julio, debí haber ido a la Municipalidad para preguntar por mi cuenta y pagarla oportunamente.

Así como la patente comercial, tengo muchos otros compromisos que tienen una fecha de vencimiento conocida. Si estoy atento a ellas y pago dentro del plazo no tengo que esperar la llegada de ninguna factura y me evito multas y disgustos. Hay muchos otros compromisos que adquiero por razón de mi profesión o mi vida social. Pero he aprendido que manejando una agenda y siendo responsable, puedo mantenerme alejado de una indignación provocada por mi mismo.

2.- Personas como uno: Aquí me refiero a familiares, amigos, vecinos, compañeros, empleados, funcionarios públicos, etc., con los cuales me relaciono de manera permanente u ocasional para resolver algún asunto. Muchas veces estás personas son la causa de mi indignación, porque por su incomprensión, indiferencia, decidia, ignorancia o simple irresponsabilidad no dan una atención, respuesta o solución oportuna a mis demandas. Un ejemplo del mal comportamiento de estos actores ocurrió la última vez que fui al Banco para retirar un nuevo talonario de cheques. Estuve dos horas esperando por el servicio porque la “niña” encargada del “Servicio al Cliente”, se alejó varias veces de su puesto de trabajo para atender los constantes llamados de su celular. Los clientes tuvimos que protestar y reclamarle al encargado de la oficina para que pusiera orden. Le llamo la atención y ...¡la fila comenzó a fluir!

3.- Entidades públicas o privadas: Aquí claramente el empleado o funcionario que nos atiende no es responsable de nuestra indignación, sino que es la empresa o entidad que presta el servicio o vende el producto. Un ejemplo del mal comportamiento de este actor me ocurrió cuando tuve que visitar la empresa de telefonía celular para cambiar mi equipo. La atención se demoró 3 horas, porque de los 34 puestos de trabajo habilitados por la compañía para atender al numeroso público que los visita, sólo habían 4 personas atendiendo. La explicación que dieron para tan reducida atención, fue que el personal estaba en hora de colación. El problema era fácil de solucionar: Bastaba que la empresa estableciera varios turnos de colación, asegurando que el mayor número de puestos de trabajo estuviera activos.

4.- Sociedad: Me he encontrado con comportamientos indignantes, atribuibles a la “naturaleza” humana según la explicación que me han dado. Es un problema de “la raza”, me dicen. Son tan comunes algunos de estos comportamientos que nadie los cuestiona, a pesar de la enorme indignación que provocan. Algunos producen risa cuando los comentamos porque nos identificamos con ellos. Un ejemplo de estos comportamientos lo vivimos a diario con las personas que no recogen la mierda de sus mascotas cuando salen a pasear con ellas.

5.- Estado: Este actor puede ser el gobierno de turno o el Estado en su expresión general. Es culpa del Sistema, suele decir la gente, porque es el responsable de regular la actividad socio-política y económica del país. El Estado es quien debe velar por el ordenamiento y comportamiento de la sociedad. Uno de los ejemplos más conocido de indignación provocada por un mal comportamiento del Estado es el ocasionado por el mal servicio del transporte público. Aunque en una situación específica se pueda atribuir el mal comportamiento a uno de los actores (usuarios, conductores o empresas) la verdad es que la operación en su conjunto adolece de fallas estructurales, sólo atribuibles a la concepción deficiente del sistema de transporte, el cual ha estado a cargo del Estado.

Como decía en un comienzo, me he convertido en un obsesivo al pretender “encasillar” cada situación de indignación que vivo o conozco dentro de una de las categorias anteriores, y ahora que algunos políticos han comenzado a proponer un cambio a la Constitución Nacional, me pregunto si es necesario y hasta que punto cambiará para mejor, la vida de quienes vivimos en éste maravilloso país de la “loca” geografía, de la Virgen del Carmen y del Buen Vino!

Antes de dar mi opinión quiero presentar el siguiente cuadro con el resultado empírico que tengo de las categorías, según el tamaño de la indignación que me producen:

Participación porcentual de las categorías de Indignación
Creación propia

La primera inquietud que tengo es sobre la real incidencia que puede tener una nueva Constitución Nacional en la modificación de los porcentajes de la tabla anterior. Personalmente, creo que ninguna Constitución ni nueva ley tenga la capacidad de modificar el comportamiento de las personas que son las responsables del 75% de las causas de mi permanente indignación.

Depende de la buena disposición o del cambio de mentalidad de nosotros los seres humanos de reducir la indignación que nos provocamos mutuamente y que injustamente atribuimos a las entidades con las cuales trabajamos... o al sistema!

Es muy triste darnos cuenta que la mayor cantidad de daño que ocurre en la sociedad es provocado por el comportamiento irresponsable de nosotros mismos. De “personas como uno” que a diario tenemos que salir a trabajar y luchar por nuestra familia. Resulta cruel sentirse humillado y enfrentarse al mal carácter y al descriterio del empleado o funcionario de la primera línea de una entidad pública o privada, como un administrativo(a), cajero(a), secretario(a), auxiliar, junior, conductor(a),.. para obtener un buen servicio o atención justa y de calidad.

Por culpa de ellos y de nuestra ignorancia, salimos renegando de la entidad donde está aquel trabajador. Nuestra rabia se hace más evidente cuando terminamos “pateando la perra” y criticando al sistema!

Basta ya de encubrir la mediocridad de las “personas como uno”. Esas que creen que solo merecen una oportuna y buena atención las personas de “cuello y corbata”, las “bien parecidas”, las más simpáticas y graciosas... Todos merecemos respeto y atención oportuna.

Si cada uno de nosotros hace la “pega” como corresponde y se coloca en los “zapatos” del otro, sin abusar del cargo que se tiene, ni “mirarse en menos”, tendríamos muchos menos motivos para quejarnos y quizás pudiéramos concentrarnos, como sociedad, en la solución de problemas más reales e importantes.

Sí creo que una mayor fiscalización del Estado, puede reducir la indignación que nos provoca las entidades o instituciones con las cuales a diario nos relacionamos. Mientras no exista en las empresas públicas y privadas una cultura por la responsabilidad social, el Estado debe fortalecer sus mecanismos de control y fiscalización. Para ello, no se requiere un cambio en la Constitución Nacional, sólo basta la voluntad del gobierno de turno y la creación e implementación de las Veedurías Cívicas, que empoderan a la ciudadanía y la facultan para ejercer un control directo en la realización de las actividades, obras o contratos que cumplen dichas empresas, con incidencia e impacto en la sociedad.

Finalmente, les invito a reflexionar sobre las situaciones que les causa indignación y preguntarse por la categoria a la cual corresponden para confirmar o no la variación porcentual que aparece en la tabla. Sería interesante poder conocer el resultado de dicho análisis.

jueves, 9 de agosto de 2012

¿POR QUÉ TANTA VIOLENCIA?

Por qué tanta violencia, si ésta no atrae a la ciudadanía ni convoca ninguna mayoría? Por qué no cambiar la estrategia, por qué no aprender de la "Campaña del NO"? Chile pasará a la historia por haber derrocado una dictadura con un plebiscito.

Qué tristeza, no quedaron herederos de aquella convocatoria inteligente y en cambio se mantienen y se fortalecen los herederos de la anarquía y el terrorismo. Asistimos a un espectáculo deprimente en donde las nuevas generaciones solo son idiotas útiles de los criminales. Se esfumó la inteligencia y tenemos que conformarnos con ir al cine para recordar la chispa de una generación que cambió pacíficamente un sistema dictatorial con una campaña publicitaria!

Los dirigentes de los movimientos sociales, están a tiempo de poder elegir Presidente en las próximas elecciones a un candidato que se comprometa con un “nuevo modelo social” si es lo que desean ...y si no les gusta ninguno de los actuales candidatos, pueden proponer otro que sí les guste!...No es posible que entre tanto inconforme, no haya un candidato para postular?...Si las mayorías están con ustedes, por qué no van a ser capaces de juntar los votos para llegar al poder? No necesitan de un partido político para inscribir un candidato, solo deben recoger firmas… Franco Parisi, las está juntando y en las elecciones pasadas las juntó Marco Enríquez-Ominami...En dónde está el problema?...Por qué tanta flojera y mediocridad?...

Nuestra sociedad no necesita de la violencia, ni de los muertos para entender que se debe combatir la injusticia social. Ninguna guerra por violenta que haya sido ha terminado con el enemigo ni ha solucionado ningún problema…  La bomba atómica no acabó con los japoneses, los alemanes no tuvieron balas para acabar con los judíos.  Los españoles no pudieron con los mapuches. ETA no pudo en España, las FARC no ha podido en Colombia…

La violencia solo conduce a más violencia. Es el negocio de los mercaderes de la guerra y son ellos quienes PROMUEVEN y PATROCINAN los movimientos sociales y los conflictos nacionales e  internacionales para que el negocio de las armas sea cada vez más rentable. Nuestra ignorancia y fragilidad son su mejor “caldo de cultivo” porque los traficantes de armas, al igual que los traficantes de drogas, son los únicos que se benefician y enriquecen de los conflictos y debilidades sociales!

Como sociedad debemos parar en seco y dejar de pelearnos por un pasado que nadie puede regresar y del cual nadie está convencido que haya actuado de mala fe. Un mejor camino o un nuevo modelo social no están ni a la izquierda ni tampoco a la derecha. Una sociedad  capitalista, comunista, socialista o religiosa,  solo existe en la mente y en los escritos de los idealistas. La humanidad ha tenido y conoce todos los sistemas socio-económicos y ha sufrido y sigue sufriendo en todos ellos por causa única y exclusiva del fanatismo que promueven sus nefastos líderes...

Arriba Chile! Si nuestra “loca” geografía y naturaleza “implacable” no ha podido doblegar nuestra cerviz, por qué habría de lograrlo una minoría de personas con su actitud temeraria y violenta?

Tenemos un país con gente maravillosa, de una solidaridad conmovedora y de un espíritu guerrero admirable. Debemos abrir nuestra mente y darnos una nueva oportunidad para que juntos logremos para las futuras generaciones, la de nuestros hijos, nietos y sobrinos, la sociedad que todos soñamos!

viernes, 3 de agosto de 2012

SI QUEREMOS AVANZAR, DEBEMOS CAMBIAR!

Al igual que la inmensa mayoría de personas, estoy convencido que en el mundo hay mucha injusticia social. Sin embargo, también estoy convencido que la sociedad, al igual que todos los países del mundo, tienen los gobiernos que se merecen...Por ejemplo, si llamas a tus vecinos a una reunión, para resolver un problema comunitario, debes sentirte contento de que asista el 20% de los invitados y si les pides una cuota para resolver un problema común, no te extrañes si te quedas solo en el salón.

Cuesta mucho rodearse de gente emprendedora y comprometida, capaz de jugársela por una causa. Pero, cuesta mucho más deshacerse de la gente mediocre e irresponsable. Vivimos en un mundo muy frágil, rodeados de gente buena, pero en su mayoría floja y limosnera. Con facilidad, adulamos a quienes tienen dinero o creemos con algún poder, y con esa misma facilidad, somos capaces de abandonar hasta a quienes nos dieron la vida, cuando les llega la vejez o simplemente caen en desgracia.

Si de verdad estuviésemos interesados en terminar con la injusticia social, deberíamos “comenzar por casa”, cambiando nuestras actitudes y dando señales que nos hagan más creíbles a quienes nos rodean. Si queremos avanzar como sociedad, debemos cambiar como personas.

Aquí van algunas recomendaciones o mejor, unas recordaciones para hacer de ese cambio personal una realidad. Al fin y al cabo no diré nada nuevo. Recuerde que "más sabe el diablo por viejo que por diablo":

1.- Juegue y respete las reglas que tiene establecida su familia, su comunidad y su país. No olvide que las reglas existen porque somos seres humanos que podemos actuar y pensar diferente. De lo contrario, viviríamos como los animales...pastando y sin reglas!

2.- Proponga cambios en las reglas, si no le gustan las existentes.

3.- Participe activamente e interactúe con los miembros de su familia, su comunidad y su país. Nadie es dueño de la verdad y siempre hay que aprender de los demás.

4.- Respete la opinión de los demás y acate las decisiones de las mayorías tomadas de acuerdo con las reglas.

5.- No sea impaciente, si las mayorías no aprueban sus ideas, revise las razones. Puede ser que sus argumentos sean débiles o que haya otras propuestas más atractivas.

6.- Si quiere protestar... hágalo, pero respete los derechos de quienes no quieren protestar.

7.- Sea creativo al protestar o dar a conocer sus ideas. No se comporte como un criminal. No confunda la pasividad ni la paciencia de quienes no participan de su causa con la debilidad.

8.- No generalice. Es la mayor demostración de nuestra ignorancia. Aunque nos cobije un mismo apellido o una misma bandera o un mismo credo, los seres humanos somos diferentes porque nacemos en distintos tiempos, y vivimos y aprendemos de manera diferente. En el fondo la única división que no tiene objeción para la humanidad está relacionada con la vida y la muerte.

9.- No viva del pasado. Es una estupidez. Nadie puede regresarlo y tampoco creo que consiga nada volviendo al origen de la humanidad. Mejor, aprenda del pasado y construya un nuevo futuro, aún con sus enemigos cuando llegue la tregua. Si abre el corazón, se dará cuenta que todo es coyuntural, que no hay enemigo pequeño y que entre la paz y la guerra hay la misma distancia que entre la vida y la muerte.

10.- Tenga claro en dónde está y en dónde quiere estar y trabaje solo o acompañado para lograr sus sueños.

11.- Recuerde que la calidad no es un bien que se compra con dinero. La calidad es algo inherente a la persona humana y es consecuencia de un comportamiento y actitud constante y consistente.

12.- No pida cosas gratis a nadie, ni exíja derechos sin exponer primero sus obligaciones. En el primer caso puede convertirse en un limosnero y en el segundo en un esclavo.

13.- Si usted es un líder político o religioso, dirigente social o empresarial, profesor o padre de familia,... recuerde siempre que su responsabilidad es aún mayor porque la sociedad que le escucha, tiene los ojos puestos en usted y por convicción, ignorancia o flojera, seguirá sus directrices.

14.- Respete la gente humilde, no se burle de su ignorancia manipulándola, no le mienta ofreciéndole lo que no puede cumplir, y menos la ofrezca como "carne de cañón" para vencer a sus enemigos.

15.- Recuerde que los sistemas democráticos no existen para que los ciudadanos "ganen o pierdan" sino para que vivamos en PAZ!

Finalmente, creo que los resultados positivos que está teniendo el gobierno de Sebastián Piñera en muchos campos sociales y económicos, a pesar de los malos pronósticos y zancadillas provenientes de todos los bandos, incluyendo sus partidarios, me confirman que en Chile ya no debería haber gobiernos de izquierda ni de derecha. Ni de empresarios ni de trabajadores. Aquí ya no caben los modelos socialistas ni capitalistas. La Concertación y la Alianza están muertas y solo viven en las mentes nostálgicas de algunos políticos...

Creo que la sociedad y la política de hoy requieren de otro tipo de líderes y políticos, que tienen el desafío y la obligación de tener planes y propuestas concretas que nos conduzcan a una sociedad con:

• Reglas claras con fiscalización efectiva.
• Igualdad en las oportunidades con equidad en la distribución del ingreso o la riqueza.
• Crecimiento socio-económico con metas alcanzables y sostenibles en el tiempo.
• Unidad nacional con autonomía étnica y regional.
• Respeto a las instituciones del Estado con atención oportuna de las necesidades sociales.
• Unidad de los chilenos con respeto de las diferencias del pasado.

Y para lograr el cumplimiento de los promesas de los políticos, los ciudadanos debemos introducir el concepto de la “Revocatoria del Mandato” para asegurar la salida oportuna de aquellos dirigentes que no cumplen en un tiempo razonable con sus metas y promesas.

viernes, 24 de febrero de 2012

Recuperar la Cultura del Precio Justo

Siempre he creído que la pobreza de muchas comunidades es por causa de malas estrategias de sus líderes, muchas veces más preocupados de mantener un caos político y social, que de buscar reales soluciones para la gente. Por ejemplo, no es posible que frente a los costos elevados del combustible, la solución a exigir sea que el Estado disminuya el precio del mismo. Qué absurdo!
El problema no es el elevado Costo de Vida que puede haber en una la sociedad, sino el bajo
Nivel de los Ingresos que tienen todos o algunos de sus habitantes. Las cosas cuestan lo que tienen que costar. La preocupación de la gente y sus dirigentes debe ser sobre, cómo conseguir los ingresos suficientes y estables que les permita adquirir los productos y servicios que necesita de manera permanente y oportuna. Somos muy “wones”, si el problema fueran los altos costos de los bienes y servicios, países como Suiza y Noruega, por ejemplo, vivirían en paro!
Los empresarios del turismo en la Patagonia entendieron esto hace mucho tiempo y por eso el turismo funciona como modo de vida para ellos. Turísticamente, la Patagonia no es accesible para la inmensa mayoría de los chilenos, pero vaya que lo disfrutan los extranjeros y los ricos de nuestro país.
Mientras, la sociedad tenga lideres tan cagados como los que tenemos, seguiremos siendo un país atrasado y con enormes brechas. Los ayseninos, al igual que todos los chilenos, necesitamos más trabajo y mejores ingresos acordes con el Costo de Vida de las regiones o del medio. Los subsidios solo benefician a unos pocos y siempre terminan favoreciendo a los que menos los necesitan, porque nuestra naturaleza humana es de “pillos”.
Debemos recuperar la Cultura del Pago Justo, por nuestros productos o por nuestros servicios. Solo así, también podremos pagar lo que otros nos piden y disfrutar de las cosas buenas de la vida.