¡A FAVOR!

     Voy a votar "A FAVOR" de la Propuesta de Nueva Constitución y para quienes les interesa mi opinión daré algunas razones. Pero, primero comenzaré por recordar una frase que me representa muy bien y que dijo la expresidenta Michelle Bachelet para justificar su aprobación a la propuesta anterior: "No es perfecta, más se acerca a lo que yo siempre soñé." Creo que esta es una frase que todos deberíamos tener presente antes de tomar una decisión el 17 de diciembre, porque ciertamente, es imposible que alguien pueda escribir una propuesta de Constitución que identifique y represente los gustos y preferencias de todos y cada uno de los chilenos. Podemos consultar en los más de 200 años de independencia y vida republicana: ¿cuál de todas las constituciones que se han escrito han dejado contentos a todos los chilenos? Igual pregunta podemos hacer en todos los países demócratas del planeta. Esto es lo mismo que cuando se va a la feria, nadie espera encontrar todos los productos que necesita, con excelente calidad y bajo precio. Lo mismo sucede cuando uno se casa: la pareja nunca es perfecta, ni como la soñaba antes de tomar la decisión de vivir juntos. Tampoco lo han sido los candidatos que elegimos para que gobiernen el país. 

     De todas maneras, elegir y aceptar esas "imperfecciones", no significa renunciar a lo que consideramos es mejor. Decidimos, porque debemos avanzar y nadie debería esperar encontrar lo ideal para votar a favor, porque lo más probable, es que primero nos encuentre la muerte sin habernos acercado un poco más a lo que soñamos.

     Esta propuesta de Nueva Constitución, al igual que la anterior, tampoco aborda en sus páginas lo que considero es fundamental para solucionar los graves y crecientes problemas sociales que nos agobian. Por ejemplo, exigencias para que a los poderes del Estado lleguen los mejores candidatos. Es tan grande y evidente el poco talento y formación de nuestros representantes y autoridades de gobierno, que sus decisiones y planes de gobierno ya no generan credibilidad ni confianza alguna. Esa incapacidad para ejercer la gestión pública los hace débiles, ridículos y vulnerables. Los problemas sociales crecen como espuma ante su ignorancia y falta de capacidad para enfrentarlos y solucionarlos. 

      

     Por supuesto que hay representantes y autoridades ejemplares, de la cuales podemos sentirnos orgullosos, pero son tan pocos, que son silenciados y opacados en medio de tanta mediocridad, tal como sucede en muchos colegios con los buenos estudiantes.

     El combate a los delitos de corrupción y al abuso del poder, tampoco tuvieron una respuesta adecuada en esta propuesta. Dejar en manos del gobierno y del congreso la creación de una Agencia Nacional Contra la Corrupción para su combate y erradicación, es tan ineficiente y absurdo, como dejar en manos de los mismos criminales el combate a la inseguridad y la delincuencia. ¿Por qué no declarar en la Constitución la imprescriptibilidad de los delitos de corrupción, la persecusión de los dineros y recursos robados hasta su recuperación total y dejar por fuera de todo cargo público y contratación con las instituciones del Estado a las personas condenadas por estos delitos? ¿Alguien puede creer que un proyecto de ley de esta naturaleza saldrá del gobierno y será aprobado por el congreso? 

     Por último y para qué extenderme en la burla que se ha hecho a los Mecanismos de Democracia Participativa, a la Participación y a la Formación Ciudadana. Muy pobre o nula es la preocupación de los expertos y los convencionales por la generación de una cultura de Participación Ciudadana más inteligente, más inclusiva y más y mejor informada, que pueda contribuir al mejoramiento de la gestión y la fiscalización pública.

     Lamentablemente, la soberanía popular continúa desapareciendo cuando se elige a los representantes y gobernantes, con lo cual se fortalecen las huelgas, los paros, las marchas y las protestas, que arrastran destrucción, vandalismo y delincuencia, en perjuicio de toda la sociedad y en beneficio de los bolsillos de quienes deben reconstruir y reponer una y otra vez, lo que mentes criminales destruyen. Está claro, que con esta propuesta de Nueva Constitución, tampoco saldremos de la era de "piedra y el garrote."...

Dicho lo anterior, reitero que votaré "A Favor", porque el proceso fue transparente, se respetaron las reglas y ganaron las mayorías, aunque no pensemos igual, ni tengamos las mismas prioridades. 

Finalmente, y esto no es menos importante: Votar "A Favor", significa desmarcarse de las extremas políticas de Chile (de izquierda y derecha), que tanto daño le hacen al país y que ahora, por primera vez, están de acuerdo y votarán "En Contra", así sea por razones diferentes.

     Votar "A Favor", es también desmarcarse de los partidos políticos tradicionales de izquierda (DC, PS, PPD y PR), que votarán "En Contra", a pesar de haber gobernado por más de 30 años desde el regreso de la democracia, que teniendo mayorías, habiendo reformado centenares de veces la Constitución actual y habiendo sido los paladines de un país más justo, eficiente y sin corrupción, han sido incapaces de demostrar que sus ideologías y modelos de sociedad son mejores que los que critican. El actual gobierno de Gabriel Boric, de ultra-izquierda, pasará a la historia como el peor que ha tenido Chile, y aunque esto es muy grave, es una buena noticia, porque con él, podemos decir, que todo el arco de la clase política ha tenido la oportunidad de ser oposición y de gobernar el país, mostrando lo que son capaces de hacer. Es por eso que debemos estar optimistas y esperar un futuro con gobiernos y oposición más maduros y sensatos, con menos obstrucción y más acuerdos transversales, enfocados en la solución de los problemas que a todos nos aquejan. ¡Amén! -Rubén Solano