domingo, 23 de febrero de 2025

MEDIOCRIDAD, ABUSO DE PODER, CORRUPCIÓN Y DESVERGÜENZA

    Este es el común denominador de la Clase Política Chilena, jamás descubierto y denunciado únicamente por este humilde opinólogo, ya que es "vozpópuli". Como dice el comediante: "¡Yo lo sé, tú lo sabes, él lo sabe, vosotros lo sabeis, ellos lo saben, todos lo sabemos!". De manera transversal, gobiernos, representantes, senadores, gobernadores, consejeros regionales, alcaldes, concejales y todo el poder judicial, han recibido críticas y denuncias por una mala e ímproba gestión, que en lugar de disminuir, crece y nos aleja cada vez más, de los primeros lugares del ranking de países menos corruptos del mundo.

     Nadie escapa al descrédito, el daño y la vergüenza, que ese común denominador hace al país, salvo quienes son acusados y declarados culpables y quienes ocupan algún cargo en la esfera pública, porque pasan "piola", en medio de la crítica cruzada, refugiándose en la creencia que la culpa y el mayor daño, ha sido realizado por los "opositores", cuando la verdad, es que todos son iguales.

    Si existe algún funcionario público o representante de la clase política honesto, es un cómplice pasivo. Un sin vergüenza más, incapaz de levantar la voz, para no perder sus privilegios y los de sus familiares. Todos enquistados en alguna Institución del Estado.

    Los regímenes dictatoriales, autoritarios y criminales, existen y prevalecen en el mundo, por el apoyo cobarde, miserable y silencioso de los cómplices pasivos.

     La ignorancia y la indiferencia de la gente para ejercer una Participación Ciudadana más Inteligente, más Inclusiva y más y mejor Informada, completan los ingredientes de ese "caldo de cultivo", que se esparce como bacteria por el cuerpo de la nación, condenando a todos los habitantes al inmovilismo y a la muerte por decepción.

    Si en la Edad Media y en la Antigüedad el pueblo era indiferente a la actividad del Estado, lo era por descarte, por desecho de quienes se consideraban los amos del poder, no por propia voluntad; por supuesto, sin incluir los idiotas, que no son exclusivos de la era moderna.
   
    Tuvieron que pasar muchos años, qué digo, siglos, para bajar de la "nube" a los amos del poder, que lo ostentaban y creían por designación divina. Ha sido necesario, conseguir a "sangre y fuego", cada avance en participación ciudadana, por ejemplo para que todos los habitantes, hombres y mujeres, tengan el derecho a elegir y ser elegidos, aunque todavía, en pleno siglo XXI, existen países enteros y segmentos de la población en muchos países del mundo, en donde el derecho al voto les es denegado o burlada su participación.

     Por todo lo anterior, la pregunta que surge entonces es: ¿Por qué los ciudadanos de un país como Chile, civilizado, democrático, progresista, envidia de la región, cuenta con una clase política tan "rasca" y una ciudadanía tan "pobre"? Una clase política que en campaña electoral busca desesperadamente "rostros chamulleros", capaces de conquistar un pueblo que solo se mueve al son de la virutilla y del maíz que riegan en las plazas y calles los partidos políticos.

    "Estamos peor, pero estamos mejor. Porque antes estábamos bien, pero era mentira. No como ahora que estamos mal, pero es verdad." Así lo dijo Cantinflas, y  no podría estar más vigente su diagnóstico, el que calza perfecto nuestro país.

   La falta de "Voluntad Política", es la frase cliché, con la cual la clase política y los cómplices pasivos, justifican su ineficiencia y la ausencia del Estado. Es la disculpa, del por qué el país no avanza, ni se dan las soluciones a los problemas, que crecen como espuma en cantidad y en antigüedad.

    Acusar a la falta de "Voluntad Política", es un eufemismo, que oculta la realidad de una clase política y sus cómplices pasivos, indolentes, miserables, sin compasión, que de extremo a extremo, solo quiere tener el control del Estado para desangrar el país.
  
     Si el problema es la corrupción, ¿por qué no declaran imprescritibles estos delitos?

    Si el problema es la dificultad para recuperar los dineros robados al Estado, ¿por qué no confiscar el patrimonio de los condenados y su parentela, por los delitos de corrupción cometidos?

   Si el problema es la falta de formación y competencias de los candidatos para ocupar cargos públicos, ¿por qué no denunciar e imponer sanciones ejemplares a quienes postulan a esos candidatos?

   Si el problema es que la clase política no se pone de acuerdo en las medidas con las cuales se debe enfrentar una demanda estructural, ¿por qué no se convoca a un plebiscito vinculante?

    Si el problema es que el gobierno equivocó el rumbo, ¿por qué no llamar a una revocatoria del mandato?

   Si el problema es que el pueblo es ignorante e indiferente, ¿por qué no establecer como prioridad nacional y obligación la Formación Ciudadana?

   ¿Por qué no reconocer que todos somos responsables de todo y de todos?

     ¿Cómo entender que, a pesar de ser el principal responsable de la seguridad del país y sus habitantes, el Estado no ha logrado garantizarla? Mientras tanto, los ciudadanos están invirtiendo sus recursos, tiempo y esfuerzo en medidas de seguridad y seguros que, en muchos casos, resultan ineficaces y no reciben ninguna valoración ni compensación.

   Resulta absurdo y paradójico, que los votantes de un país deban elegir de entre los peores, el menos malo para Presidente de la República y demás cargos de representación, cuando lo lógico es elegir entre los mejores, tal como los concursos de belleza, donde se elige la más bella de entre las bellas.

   La falta de "Voluntad Política" jamás debería ser una excusa que justifique la no solución de los problemas sociales, porque en una sociedad que se precie de democrática y conducida por personas honestas y sensatas, sobra voluntad para resolver los problemas, porque es un valor que forma parte de la actitud y la esencia natural de toda persona que aspira a gobernar un país y representar a sus habitantes, especialmente, en una sociedad que es libre y solidaria, como la nuestra. -Rubén Solano

viernes, 21 de febrero de 2025

ES UNA ETAPA DE LA VIDA

     "A muchas personas les parece que escribo con fluidez, pero confieso que con el paso del tiempo, este ejercicio es todo un desafío para mí. No es que no sepa lo que quiero decir. Mi mente lo sabe, todo está muy claro dentro de mí, pero en alguna parte siento que se desconecta lo que tengo dentro de mi mente, con aquello que me permite exteriorizarlo para que los demás puedan sentirme, verme, leerme o escucharme. Es como cuando en la casa el sistema eléctrico está bien, pero las luces "parpadean" hasta que ya no encienden." -Anónimo

     La desconexión no es violenta ni generalizada en la etapa de envejecimiento, como la que sucede en un corte de energía. La desconexión cuerpo-mente es gradual, progresiva e imperceptible en el día a día. Es notoria para los demás, cuando a pasado el tiempo y dejamos de vernos.

    Con el paso del tiempo, nos vamos sintiendo como dentro de una escafandra, porque vemos, escuchamos, sentimos y entendemos lo que dicen. Pero, los demás, no parecen captarlo.

    No escribo este artículo, para que tengan compasión de las personas mayores, porque el envejecimiento es un proceso natural de la vida, que igual que pasa con los seres humanos en la etapa de infancia, debe ser visto con normalidad. Nadie tiene compasión de los niños porque no responden como los adultos. Entendemos esa "desconexión" mente-cuerpo que es natural y es la razón, para que padres y adultos les acompañen hasta que alcanzan el uso de razón, que es cuando se logra y se hace evidente la conexión que les da autonomía. En la etapa de envejecimiento el proceso es inverso, porque lo que ocurre es un proceso natural de desconexión.

    En la etapa del envejecimiento la comprensión y el respeto es lo que se espera de la familia y la sociedad. En este sentido, no está bien y es un grave error infantilizar y tratar a las personas mayores como si al llegar a esta etapa, todos por igual padecieran alzheimer, que es una enfermedad que responde a causas o patologías especiales. 

     Durante el envejecimiento los seres humanos son más lentos, pero no ingenuos y mucho menos estúpidos. Seguirán ignorando lo que siempre han ignorado y seguirán comportándose como siempre, si quienes los rodean, les tratan como siempre los han tratado. Se pierden habilidades motrices, pero son más sabios, porque el tiempo lo dedican al pensamiento y la reflexión a diferencia de otras etapas de la vida, donde el tiempo es dedicado a la exploración y al uso del cuerpo, que es esencial.

    La ingenuidad es un comportamiento que no es propio del envejecimiento, ya que puede ocurrir a cualquiera, en cualquier etapa de la vida, con más frecuencia en etapas más tempranas, cuando la interacción con otros, es más común y frecuente, porque es allí donde aflora con más nitidez nuestro carácter y formación.

    Creo que la Inteligencia Artificial será toda la ayuda que necesitan las personas mayores para cruzar la etapa del envejecimiento de manera digna y recibiendo el respeto de quienes les rodean, cuando a través de ella puedan exteriorizar con fluidez lo que hay en su mente, sin necesidad que personas de buena voluntad piensen y decidan por ellas. -Rubén Solano

sábado, 15 de febrero de 2025

¡NECESITAMOS UN MILAGRO!

    La democracia es un sistema de gobierno que se basa en la participación ciudadana y la responsabilidad de las autoridades. Sin embargo, cuando los cambios estructurales se imponen contra la voluntad de quienes piensan diferente, no es democracia, es tiranía.

     La democracia implica acuerdos y cuando estos no se logran, es la soberanía popular quien debe decidir. Para eso existen la consulta popular y los plebiscitos, que pueden ser vinculantes para quienes están en el poder y de aceptación para las minorías.

    La ciudadanía tiene una gran responsabilidad en la democracia, debiendo educarse en la razón de ser y la importancia del Estado y sus Instituciones, en la existencia y el uso de los mecanismos de participación ciudadana y en la participación activa en la gestión y la fiscalización pública.

    En Chile, tenemos una nueva oportunidad de elegir a nuestros representantes en las próximas elecciones: Presidente de la República, Senadores y Diputados.

     Casualmente, los chilenos hemos tenido la oportundidad de experimentar la TOTALIDAD de las tendencias políticas e ideológicas existentes en los últimos cincuenta años. Desde la extrema derecha hasta la extrema izquierda han gobernado el país. Hemos vivido en dictadura y en democracia. El país ha sido gobernado por hombres y mujeres, personas mayores y jóvenes. Hemos conocido mentes brillantes y no tanto. Gobernantes que nos han llenado de orgullo y no pocos de vergüenza. Todos con un común denominador: han sido elegidos y aceptados por grandes mayorías. Es difícil calificar la gestión de cada uno, sin despertar la crítica injusta o el fanatismo ciego de una parte importante de la ciudadana.

   De todas maneras, en comparación con otros países de la región, todavía Chile parece avanzar y mantener una buena reputación a nivel internacional, que no debe llenarnos de orgullo, si reconocemos lo que se ha retrocedido en materia social y económica y el injusto retraso en la solución de muchos problemas que han trascendido todos los gobiernos, creciendo en cantidad y en extensión a nivel nacional; siendo la ineficiencia en la gestión pública, la corrupción y el abuso de poder, los más graves problemas y principales causantes de todos los demás. La clase política perdió su norte y la vergüenza. Si hasta la juventud, que era nuestra esperanza y parte de las reservas morales del país, nos ha provocado la última y más grande decepción, con un comportamiento frente a la visión y el qué hacer del Estado, que no se compara con nada visto en la historia de la nación.

     Debemos perseverar en la generación de una cultura de participación ciudadana más inteligente, más inclusiva y más y mejor informada. Solo así podremos elegir los mejores y construir una sociedad más justa y democrática.

    Es fundamental que la ciudadanía exija a las autoridades de gobierno y a quienes están al frente de sus Instituciones, idoneidad y probidad, pero son los partidos políticos quienes deben velar por ofrecer un perfil profesional y de competencias de quienes postulen para ejercer con autoridad y responsabilidad los cargos encomendados.

    La honestidad y la confianza deben volver a la esencia de la gestión pública. Es necesario terminar con el oportunismo y la farsa con que algunos se han aprovechado e infiltrado en la clase política para acceder al control del Estado y sus Instituciones. Necesitamos que aflore la sensatez. Necesitamos un milagro. -Rubén Solano

sábado, 1 de febrero de 2025

EL PRIMER "MILAGRO" DE DONALD TRUMP

    Las primeras medidas adoptadas por Donald Trump, han generado una respuesta inmediata de los gobiernos "exiliadores" de la región que curiosamente, han puesto una mirada de preocupación por las condiciones de miseria, angustia y desesperación en que viven en los Estados Unidos y en otros países, los migrantes indocumentados o irregulares.

   Por ejemplo, en respuesta, los Presidentes de México y Colombia, han hecho un llamado a sus compatriotas a "regresar a sus paraísos lo antes posible, donde les esperan con los brazos abiertos y ayudas económicas".

    Un llamado poco creíble después de conocer las duras sanciones arancelarías y suspensión de visas anunciadas por Trump a Petro al conocer su "pataleta de niño mal educado".  De todas maneras, una invitación sin precedentes en la historia de las migraciones, que me "conmueve hasta las lágrimas", ya que lo normal son las invitaciones promovidas por potenciales países anfitriones que ven la migración como algo positivo, una contribución al crecimiento y al desarrollo de sus países, como lo hizo Chile con los haitianos en el gobierno de Michelle Bachelet y con los venezolanos el gobierno de Sebastián Piñera, pero que al desbordarse la migración, pasaron a ser una carga insoportable y un problema del que ahora nadie quiere hacerse cargo.

    Habrá que esperar cuántos migrantes irregulares van a atender estos llamados de retorno, creer de nuevo en las promesas de sus gobiernos y regresar voluntariamente a sus países de origen o seguir vagando por el mundo en busca de otros países más creíbles y estables; y cuáles serán las ayudas económicas que les esperan, porque las razones por las cuales se ha dado la migración en este continente, cada vez más masiva y sin esperanza de retorno, es la pérdida de confianza en la clase política, la inseguridad, la extrema violencia y el abuso del poder, que han hecho llegar regímenes dictatoriales a algunos países, que hacen que las buenas intenciones y las ayudas económicas se esfumen o escapen por su indolencia, mediocre gestión, abuso de poder y corrupción. Ya se ha dicho de muchas maneras: los migrantes no buscan el paraíso, solo quieren salir del infierno en que se transformaron sus países de origen.

    Es importante recordar que, según las cifras, desde 2009 hasta 2024, los gobiernos de Estados Unidos han deportado más de 5.0 millones personas, de los cuales, más de 4.0 millones son mexicanos en situación migratoria irregular. Abajo les dejo un enlace del diario El País, que presenta un resumen muy completo de estudios de las deportaciones de mexicanos realizadas en los últimos 15 años por los gobiernos de Barack Obama, Donald Trump y Joe Baiden. Aquí se ve con claridad que la política de deportaciones es tan antigua como USA y que es mejor atender la sabiduría popular cuando dice: "Cuídenme de las aguas mansas, porque de las turbulentas me cuido yo", toda vez que ha sido Barack Obama quien más deportaciones ha ordenado.  En otro enlace pueden ver un resumen de la Oficina del Censo de USA sobre el número de migrantes hispanos que hay y su tendencia al mayor crecimiento en los últimos años, lo que refleja la enorme crisis de gobernabilidad en que están sumidos los países latinoamericanos. La pregunta es: ¿En dónde están y qué hacen los migrantes de esos países deportados en los últimos años? Y la otra pregunta que siempre me ha dado vueltas: ¿Por qué el mayor número de migrantes de Latinoamérica pertenece a los países cuyos gobiernos o regímenes son precisamente los más "progresistas", que llegan al poder con la promesa de terminar con la pobreza, el abuso, la corrupción y la injusticia social?

   Es urgente que los países de América con gobiernos democráticos y líderes sensatos se unan para rescatar los países secuestrados por regímenes criminales, que llegaron al poder con la falsa promesa de construir una sociedad más justa para todos y después de muchos años de esa promesa, sólo han traído más pobreza, hambre y miseria a sus habitantes que por millones han huido con lo único puesto, abandonado lo poco que tenían. Hoy vagan por el mundo, siendo la causa principal del hacinamiento y el mayor foco de la violación de los derechos humanos en TODAS las fronteras del mundo.

   No olvidemos que Haití, Cuba, Nicaragua y Venezuela, son países con más denuncias sistemáticas por violación de los derechos humanos y con mayor número de ciudadanos forzados a salir de sus países. Sin embargo, no han mostrado interés, ni preocupación alguna por las medidas de Donald Trump, es más, las puertas de esos países permanecen cerradas y rotas las relaciones diplomáticas con el mundo exterior de países que los critican y defienden la democracia y protegen los derechos humanos. Esto no debe extrañar a nadie, porque son países cuyos regímenes los han transformado en refugios, balnearios y paraísos de organizaciones criminales y terroristas. Los que no han podido escapar sirven como esbirros, incapaces de dar un golpe o renunciar a su limosna.

      Es difícil preever el futuro de América Latina y el de los millones de migrantes apostados en las fronteras del mundo. Por eso, el problema de la migración no es sólo de las potencias mundiales, ni de los países más desarrollados. Es principalmente una responsabilidad de los gobiernos que elegimos y de la actitud pasiva e indiferente que asumimos como ciudadanos frente a sus actos de creciente corrupción y abusos de poder. -Rubén Solano

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* Radiografía de los mexicanos deportados de Estados Unidos: 4,4 millones en 15 años, de la mano dura de Obama a la xenofobia de Trump | EL PAÍS México https://search.app/hfGozKqzjUKEgEMm8

* Nuevas estimaciones resaltan las diferencias de crecimiento entre las poblaciones hispana y no hispana de los Estados Unidos. https://www.census.gov/newsroom/press-releases/2024/population-estimates-characteristics/population-estimates-characteristics-spanish.html